En rueda de prensa, el comisario
Juan Pereira informó sobre la detención de la presunta homicida.
En al menos tres homicidios, unos
más recientes que otros, puede estar involucrada la mujer que, junto con otro
delincuente, fue aprehendida recientemente por el Cicpc en el centro comercial
Sambil, los cuales se hacían pasar por irregulares, tanto en Rubio como en San
Cristóbal.
Nathaly Sayre Ruda Molina, de 35
años de edad, quien se hacía llamar Comandante Charo, estaba solicitada desde
hace varios años por un tribunal, dada su participación en el homicidio de una
dama identificada como Isley Carolina Gálviz, cuyo cadáver fue localizado
descompuesto y con signos de estrangulamiento, el 7 de diciembre de 2007,
varios días después de su desaparición, en el municipio Junín.
Ruda Molina, al momento de su
detención por las autoridades, tenía en su poder un documento de identidad
falso con el nombre de María Isabel Pérez Moreno. Fue detenida el miércoles
junto con Jean Carlos Moncada, alias Comandante Camilo, en el centro comercial
Sambil de esta ciudad.
Ambos se dedicaban,
aparentemente, a la extorsión y a cometer homicidios en Rubio, San Cristóbal y
otras ciudades vecinas. Ruda Molina ya estaba requerida por el delito de
homicidio, por un juzgado en funciones de Juicio del Táchira, explicó el
comisario Juan Pereira, jefe del Cicpc-Táchira.
Adicionalmente, continúa Pereira,
tras la captura del hombre y la mujer, al hacer una inspección de rigor en el
vehículo en el que se movilizaban, hallamos evidencias que los relaciona con
dos asesinatos en la población de Rubio.
Sin embargo, continuamos la
investigación. Estamos haciendo estudios criminalísticos para verificar si
pudieran tener relación directa con otros casos. Pero, puntualmente, ambos son
delincuentes, extorsionadores, que pudieran liderar grupos irregulares,
haciéndose llamar comandantes. Y, por supuesto, estamos verificando si guardan
relación con estos grupos que operan en la frontera, añadió el funcionario
policial.
Los homicidios más recientes en
los que estaría involucrada la pareja, aunque no especificó en qué medida, son
los del adolescente de 17 años de edad, Carlos Eduardo Maldonado Lizarazo,
perpetrado el 25 de abril de 2012, y el del comerciante José Gabino Martínez,
ocurrido el 26 de enero de este año; y un caso de lesiones personales, donde
figura como víctima Germán Barragán Jaimes, en fecha 3 de mayo de 2012.
Maldonado Lizarazo fue ultimado
de 5 balazos en la cabeza, por dos sicarios que lo interceptaron, cuando
presuntamente, en compañía de otra persona, se movilizaba a pie por el sector
invasión Florida 2000, en El Poblado, municipio Junín.
Estudiaba el séptimo año en el
liceo bolivariano Mercedes Mora de Navarro, con sede en Bramón, y tenía su
residencia en El Poblado.
En ese momento, se especuló, la
víctima estaba en compañía de un sujeto que apenas tenía unos días de haber
salido en libertad del CPO, y que pudo huir del sitio. Se creyó, incluso, que
el real objetivo de los sicarios era el exrecluso, y no el estudiante.
En el caso del comerciante
Martínez, éste fue asesinado de siete tiros, también por dos sicarios en moto,
que lo interceptaron frente a un salón de pool, donde conversaba con algunos
amigos, en la parte baja del sector La Victoria, de Rubio.
Martínez, de 44 años de edad,
vivía en la avenida 3 de La Victoria, y fue atacado a tiros a las afueras del
establecimiento denominado La Maravilla, en la calle 14 con avenida 3, frente a
la Cruz de la Misión, en la capital de Junín.
(Fuente: Diario La Nación)