Julián Julián Rodríguez Salas, un excelente médico Veterinario, además de un coleador por afición, perdió su vida cuando sólo tenía 29 años.
Los criminales a quienes no les
tembló el pulso para dispararle en reiteradas ocasiones, lo mataron porque el
muchacho se negó a entregar su camioneta.
La fecha que marcó la vida de los
familiares de Rodríguez Salas y la cual se convirtió en la peor para ellos fue
el 17 de octubre del 2011. “JJ” como era conocido por sus seres queridos debía
salir a realizar una diligencia y lo hizo en su camioneta, una Cheyenne.
El joven se encontraba en la
carrera 22 entre calles 56 y 57 en la ciudad de Barquisimeto (estado Lara),
cuando fue interceptado por dos maleantes a plena luz del día. El médico
veterinario, quien ya había sido víctima del robo, arrancó su vehículo para no
entregarlo y fue allí cuando los delincuentes le dispararon.
El 5 de junio del presente año la
Guardia Nacional atrapó a Geilin Javier Barradas (22) por supuestamente
encontrarse robando un vehículo y además presentó un antecedente del 23 de
julio del 2005 por el mismo delito.
Los castrenses no sabían a
quiénes tenían en su poder, hasta que una comisión del Cicpc lo identificó como
el presunto autor material del crimen de Rodríguez Salas. Falta un segundo
delincuente y se está trabajando en su identificación, informó Rafael Mujica,
jefe del Cicpc Barquisimeto.
(Fuente: Diario El Impulso / Karina Peraza Rodríguez)