La Comisión Presidencial para el
Control de Armas, Municiones y Desarme
informó que para este mes está previsto destruir 16.118 armas de fuego.
En una nota de prensa la comisión
destacó que en Venezuela se ha venido aplicando una amplia política sobre el
desarme de la población, a través de la incautación y destrucción permanente de
estos artefactos, por lo que en menos de
10 años han destruido más de 264.607 armas.
Añadió que esta cifra pone al
país a la vanguardia en la destrucción de armas de fuego en América Latina, con
el objeto de garantizar el desarme de la población civil.
La organización resaltó esta
cifra con motivo de la celebración este
lunes 9 de julio, del Día Internacional de la Destrucción de Armas de Fuego,
fecha fijada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tras la
realización de la Conferencia Internacional sobre el Comercio Ilícito de Armas
Pequeñas y Ligeras, efectuada en el año 2001 para fortalecer aquellas acciones
destinadas a la destrucción masiva de estos letales instrumentos.
“La política de nuestro país en
torno a la destrucción periódica y consistente de armas de fuego es una
demostración efectiva de la voluntad que existe por parte del Gobierno, los
poderes públicos y la sociedad civil organizada de sumar esfuerzos para reducir
las situaciones de violencia que afectan a nuestra sociedad y poder reducir la
presencia de estos instrumentos de muerte”, subrayó el secretario técnico de la
Comisión Presidencial para el Control de Armas, Municiones y Desarme, Pablo
Fernández.
La fundición de armas de fuego se
efectuará en la Siderúrgica del Turbio (Sidetur), ubicada en Barquisimeto,
estado Lara. Ahí se fundirán en un horno
a 1.600 grados centígrados durante 45 minutos para así cumplir los protocolos
internacionales de seguridad.
Alfredo Roberto Missair,
coordinador residente del Sistema de las Naciones Unidas en Venezuela,
manifestó que la fundición de las armas garantiza una destrucción completa,
absoluta y técnicamente segura de las mismas.
“Es la mejor forma de destruirlas
porque las armas pasan a ser lingotes de metal que se transforman luego en
cabillas, perfiles o en rieles, un uso más doméstico y menos agresivo“, explicó
el experto durante su participación en el acto de destrucción de armas que se
realizó en septiembre de 2011 en el país.
(Fuente: AVN)